BLOGGER TEMPLATES - TWITTER BACKGROUNDS »

19 de junio de 2010

"Lo que alguna vez fuimos".

Y estoy sentado acá, pensando en vos, en ese alguien que una vez por mi vida pasó.
Quizás no me encuentro en los archivos de tu memoria, ni soy situación de ninguno de tus días, fuí quizás algo que pasó y entre minutos, segundos, casi ni eso... se evaporó en tu vida.
Aún así, jamás podría olvidar el tono de tus ojos, y la textura de piel, la sensación de tus labios, y el son que tenían tus palabras.
Hoy, somos un dueto de desconocidos, mundo distintos, memorias apartadas, ni una intencion, ni viejas sensaciones nos unen, quizás de mi parte sí, aún puedo sentir... pero igual, no es algo mutuo, reciproco, solo producto de mi extraño y perdido corazón, con meras necesidades, generadas por tanta soledad, soledad de palabras intimas, de algún amor, de algún alguien que el lazo incluya pasion, promesas, proyectos... alguien que conquiste cada gota de sangre de las cuales mi corazón, se encarga de bombear.
Imagino, traigo al presente conmigo, aquellas situaciones, en la que sobre una cama, mirando al techo, podíamos planearlo todo, sentirnos... amarnos, piernas entre cruzadas, y corazónes conectados.
Faltaba poco para mi partida... y una vez más en una larga noche, nos volviamos a amar, entre besos y manos escandalosas.
Hoy, no somos nada, nuevamente, lo recuerdo... mi pensamiento, se dispersa, y tu imagen se condensa desproporcional.
Sabanas impregnadas con tu fragancia, un par de besos diluidos.... magnificos momentos, eramos buenos amantes....
Hoy somos desconocidos.
Mirarte a los ojos una vez más y poder tomarte de la mano, sería lo ideal...
En un juego de miradas, retenerte dos segundos, sin dejarte partir...
cada puerta y ventanas, cerradas...
poder expresarte cuanto de menos te hecho, y cuanto anhelo una vez más esas noches de a dos, jugando a ser lo que hoy, sin lugar a dudas no somos.


Luis R. Parodi.

14 de junio de 2010

"Suciedad en mis labios".

Detonadas baldosas con mis llaves partidas, mis zapatos destruidos, porciones de barro por doquier.
Respirando, y cayendo, cayendo... lentamente cayendo.
Experimento el sabor a piso helado, frió, casi congelado, suciedad sobre mis labios.
La sangre de mis heridas expresan todo por si solas.
Tengo un conjunto de telas dañadas, y una desnudez casi evidente.
Pupilas dilatadas, pelos desgastados.
Perdí el sentido, la inocencia, una fuga de mi corazón contamina el ambiente, como un gas, todo se entorpece.
Solo respiro y a los lejos puedo dibujar los colores de tu calzado, casi monocromáticos. Me observas, me contemplas... la sensación de tus pisadas al pasar sobre mi espalda, como el paso sobre un elemento que atormenta tu dirección, me anestesian, amortiguan mis gritos de dolor y este corazón ahogado, deshidratado, carente de tus palabras.
Te dispersas, te conviertes en partículas, y yo tan solo, me veo consumir.
Cuadros licuados en el piso, pintura descascarada...
Me desvanecí en suspiros y llamados, en silencio de espera.
Te marchaste, no pude buscarte, no pude perseguirte atraves de tus pisadas dibujadas esporádicamente sobre lento caminar, mirar lamentoso, pómulos colorados, pecho atónito.



Luis R. Parodi.